Monday, May 12, 2008

suena el teléfono

- que te pasa? porqué hablás así?

dijo ella

- así cómo?

dijo él

-así medio asustado... estás sólo?

- si, si, estoy sólo...

claro que diría eso

- ah, pensé que estabas con la idiota de tu mujer

-idiota de mi mujer?

- si, es idiota. pero no por ser una cornuda sino por estar con vos, otro estupido. y yo soy otra.

- y... si... para qué llamaste?

-para decirte que te odio

él percibió que si bien no se había animado a terminar todo... estaba teniendo u na segunda oportunidad de arreglar su vida. para lograrlo sólo debía evitar impedir que su amante se vaya, del modo que él sabía hacerlo.

-bueno, entonces con esta conversación estamos dejando de tener relación y ya nunca nos veremos, no?

-si, adiós.

él pensaba que sería el fin de la doble vida, de las dificultades para ocultar, de la fea sensación de cada noche cuando besaba a su mujer, que aún quería. y quizás así sería.

en ese momento salió su mujer del baño

él le dijo que la amaba

y sonó el teléfono nuevamente

pero ahora atendió ella

(cuando leído de arriba para abajo, esto queda como el recuerdo de una conversación, en la cabeza de él, mientras bajaban las escaleras de la casa en dirección al auto)

No comments:

Followers